
¿Cómo Se Desempeñaron los Concursantes de Supervivientes en la Prueba Cultural?
La última gala de 'Supervivientes 2025' dejó a los espectadores atónitos, no solo por el desenlace de las nominaciones, sino por el sorprendente resultado de la prueba cultural que se llevó a cabo. ¿Quién podría haber imaginado que celebres concursantes, algunos de ellos sin duda conocidos por su carisma y habilidades, fallarían en preguntas de cultura general?
La dinámica del juego, presentada por Laura Madrueño, fue ingeniosa: por cada respuesta correcta, los participantes podrían disfrutar de un trozo de chocolate, mientras que aquellos que fallaran tendrían que afrontar el temido jalapeño. La tensión y el humor estaban garantizados.

El primer reto fue simple, pero fundamental: ¿Quién fue el vocalista de Queen? Solo Anita Williams no pudo responder correctamente. Sin embargo, la situación se tornó más complicada con preguntas como ¿Quién es el autor de la Sagrada Familia en Barcelona?, donde solo Joshua falló al no identificar a Gaudí.
Preguntas aparentemente fáciles, como ¿Cuántas letras tiene el abecedario?, llevaron a algunos participantes a errar, un hecho que incluso provocó risas entre el público. La prueba continuó con cuestionamientos como ¿En qué palacio residen los Reyes de España?, donde Carmen Alcayde y Joshua no supieron que se trata de La Zarzuela.
Uno de los momentos más sonrojantes llegó con la pregunta acerca de ¿Quién fue el primer presidente de la democracia española?. Mientras que otros participantes acertaron con Adolfo Suárez, Montoya, Anita y Álex Adrover se quedaron sin respuesta.

Los errores no se detuvieron ahí. En la última ronda, cuando se preguntó ¿Qué letra representa el número 500 en números romanos?, solamente dos concursantes, Makoke y Álvaro Escassi, acertaron la respuesta: D. Finalmente, todos fallaron al identificar al autor de El Cantar de Mio Cid, a excepción de Terelu Campos.
La prueba cultural ha generado un mix de risas y un recordatorio sobre la importancia del conocimiento general, un componente esencial que a veces se subestima. Sin duda, esta dinámica dejó a los concursantes —y a la audiencia— con ganas de más, mostrando que la cultura también puede ser divertida y emocionante.
La interactividad del concurso y la oportunidad de disfrutar del momento hicieron que el evento se convierta en uno de los más recordados de la temporada. Así que, ¿qué opinan ustedes sobre los conocimientos culturales de los concursantes? ¿Deberían tener otra oportunidad para demostrar lo que saben?
Nos gustaría escuchar sus opiniones y reflexiones en los comentarios.