Las monedas de dos euros, muy buscadas por los coleccionistas, pueden alcanzar precios de hasta 3.000 euros

La inversión en monedas es una de las más rentables en el mercado debido a la alta revalorización que alcanzan las piezas más codiciadas por los coleccionistas. Según su antigüedad, estado de conservación, material, lugar de acuñación, errores cometidos en su fabricación y escasez, pueden alcanzar precios de hasta 18,9 millones de dólares, cantidad que se pagó por la Double Eagle de 1933, subastada en 2021 por Sotheby’s y considerada la moneda más cara del mundo.

A gran distancia de este precio se encuentran algunas monedas de dos euros acuñadas por los países de la zona euro, cuyo valor ha aumentado considerablemente. Algunos propietarios las están vendiendo ahora en línea por hasta 4.700 euros la pieza. Sin embargo, esto no significa que logren obtener esa cantidad. Las más caras vendidas hasta el momento rondan los 3.000 euros.

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El valor de las monedas de dos euros frente a las de un euro se debe a que son las únicas de las emitidas por los países de la zona euro que permiten variar el diseño de su anverso, gracias a que pueden emitirse ediciones conmemorativas. Esto significa que cada Estado puede acuñar hasta dos de estas ediciones especiales al año, más una adicional si todos los países llegan a un acuerdo.

Según indican desde la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, "la principal finalidad de la acuñación y emisión de las monedas de dos euros es la difusión cultural y artística, así como la conmemoración de eventos importantes". Ejemplos de ello son las monedas emitidas para conmemorar la caída del muro de Berlín o la celebración de los Juegos Olímpicos.

Desde el Banco de España también destacan que las monedas de dos euros conmemorativas "están destinadas a la circulación y son de curso legal en toda la zona del euro", y que "su volumen máximo de emisión está limitado".

Moneda de dos euros que conmemora el 25 aniversario de la muerte de la princesa Gracia de Mónaco por la que se han pagado este año 2.900 euros.

El atractivo de Gracia de Mónaco

La escasez de determinadas monedas conmemorativas de dos euros les da un mayor valor. Esto, unido a su rareza, aumenta su atractivo para los coleccionistas y dispara su precio, especialmente si presentan algún error que las hace aún más singulares.

Entre las más valoradas se encuentra la moneda dedicada a la princesa Gracia de Mónaco, también conocida como Grace Kelly, acuñada en 2007 para conmemorar el 25 aniversario de su muerte. Este año, se ha vendido un ejemplar por 2.900 euros. Según expertos de CaixaBank, "esta pieza conmemorativa es considerada la joya de la corona de las monedas de dos euros de colección. Es la que alcanza los valores más altos en subastas y compraventas".

Su alto precio se debe a que reúne características poco comunes, como el hecho de que fue producida en Mónaco, un país que solo emite monedas conmemorativas en formato de presentación para coleccionistas. Otra de sus 'virtudes' es que su producción fue muy limitada, con solo 20.001 ejemplares. Además, según fuentes de CaixaBank, "el motivo de esta pieza es muy significativo: conmemoraba la trágica muerte de la reina Gracia de Mónaco en un accidente de tráfico, una tragedia que conmovió al mundo".

Otro factor que aumenta su valor es que las monedas fueron acuñadas en calidad flor de cuño, que es la que tienen las primeras piezas que salen de un cuño completamente nuevo. Es decir, tienen menos imperfecciones y pierden menos relieve con el tiempo.

Moneda de dos euros emitida por el Banco Central de Lituania dedicada a la Reserva Natural de Zuvintas por la que un coleccionista pagó 2.400 euros.

Cuando el error se paga caro, a 2.400 euros

Junto a la moneda de la princesa monegasca, otra de las mejor valoradas es la de dos euros emitida por el Banco Central de Lituania en 2021, dedicada a la Reserva Natural de Zuvintas, un Patrimonio de la Humanidad.

En este caso, su valor se debe a un error. Se acuñaron 500.000 ejemplares de esta pieza y aproximadamente el 10%, unas 5.000 monedas, presentaban un error en el diseño de su canto. En lugar de la inscripción habitual en letón, Laisve Vienybe Gerove (Libertad, Unidad, Bienestar), aparecía "Dievs Sveti Latviju" (Dios bendiga Letonia). Este fallo convirtió a estas monedas en rarezas y multiplicó su valor, llegando a venderse hoy en día por 2.400 euros.

El Vaticano cotiza al alza

La moneda que conmemora el XX Día Mundial de la Juventud, emitida en 2005 por el Vaticano, también se encuentra entre las piezas caras. Esto se debe a que "las emisiones de monedas de dos euros conmemorativas de microestados, como el Vaticano, suelen valorarse por encima de lo normal, ya que solo se emiten en edición para coleccionistas y las series son limitadas", señalan desde CaixaBank.

Aunque su producción fue mayor que la de la moneda dedicada a Grace Kelly, con 100.000 ejemplares, esta moneda es muy deseada por los coleccionistas debido a que su número es reducido en comparación con las monedas de dos euros emitidas en otros países, como España, donde se pueden acuñar hasta 1.500.000 ejemplares de una sola edición conmemorativa.

El precio de la moneda del Vaticano depende de su estado, pero "se pueden llegar a pedir hasta 400 euros por ella", informan los expertos de CaixaBank