
¿Realmente Sabes Qué Pasó en Las Ventas con Fortes?
La tarde del 21 de mayo de 2025 se convirtió en un hito memorable para el mundo del toreo cuando Saúl Jiménez Fortes deslumbró en la plaza de Las Ventas. Un evento que, además de emocionar a los asistentes, ha suscitado un intenso debate sobre el arte y técnica del toreo moderno.
Fortes, tras una larga ausencia, logró recuperar la esencia del toreo auténtico con una actuación que dejó a todos atónitos. Como bien se decía, "así se torea, así se carga la suerte!" Esta declaración resonó en cada pase y movimiento del torero, quien hizo alarde de su capacidad innata para conectar con el público y, sobre todo, con el toro.

Durante su faena, Fortes mostró una técnica depurada, caracterizada por una pureza y un aplomo que difícilmente puede ser igualado. A medida que avanzaba la corrida, logró extraer lo mejor de su primer toro, a pesar de que la crítica había anticipado un desafío. Los expertos en toreo coincidieron: lo que Fortes llevó a cabo fue una verdadera obra maestra de encaramiento y dominio.
Las circunstancias no siempre fueron favorables, especialmente con el manejo de la espada, donde varios pinchazos desmerecieron su actuación. Esto fue un recordatorio contundente: "hay que matar los toros, Fortes, artista!" enfatizó un crítico que destacó lo inaceptable de perder ocasiones tan valiosas por fallos técnicos. Sin duda, la técnica en el manejo de la espada ha sido el talón de Aquiles de un torero que, de otro modo, podría haber alcanzado la gloria absoluta esa tarde.

Comparando con otros toreros presentes, como Morenito de Aranda y Adrián de Torres, la tarde fue una montaña rusa de emociones. Morenito, aunque realizó esfuerzos, no logró acaparar la atención que Fortes reclamó desde su primera intervención. La competencia fue despiadada y las expectativas estaban altas, pero al final, el estilo y la audacia de Fortes se llevaron los honores de la jornada.
La discusión que surge, entonces, es cómo el arte del toreo puede ser ejemplificado a través de actuaciones tan variadas. La combinación de elocuente técnica, pura emoción y el clímax del espectáculo son factores que definen la calidad de un torero. Mientras algunos abogan por la pureza de la técnica, otros apuntan a la capacidad de contar una historia a través de cada muletazo. La pregunta es, ¿quién realmente tiene el derecho a definir el arte del toreo?
Esta corrida resultó más que un evento de entretenimiento; fue un espectáculo que mutuamente retó tanto al torero como al público. Una combinación de talento, desafío y una pizca de tragedia con la espada, dejaron a muchos con ganas de más. La plaza volvió a rugir, pero en esta ocasión con un eco de reflexión tras la actuación de Fortes. ¿Crees que la habilidad de un torero debe ser medida solo por su arte, o también por su capacidad para ejecutar las maniobras finales? Deja tus comentarios y opiniones sobre una de las tardes más memorables de la feria de San Isidro.